Un joven de 19 años robo un auto y cuando fue detenido dijo que el auto era de su primo y que el solo iba por refrescos. Después de pasar 7 días en la cárcel la juez decidió que un buen castigo para este chico era, prohibirle beber su bebida favorita. Como, según el, iba a comprar refrescos en el auto robado, el castigo incluye 4 años de probatoria en donde el no puede beber Pepsi. Si, el castigo, es no beber Pepsi. Ademas una multa de $100 dolares y 100 horas de servicio comunitario. Esto sucedió en Hawaii.